Hoy os traigo un bizcocho muy esponjoso.
Me encanta tener siempre algún dulce casero para merendar, ya que acompañado de un café, en esta época del año, es lo que más me gusta.
Tiene un sabor fresco que le aporta la calabaza riquísimo, y un olor a canela indescriptible.
La receta es de internet, pero la anoté hace ya mucho tiempo y no me acuerdo de qué blog la cogí.
Espero que os guste.
Vamos con los ingredientes:
- 50 gr de nueces
- 150 gr de calabaza
- 4 huevos
- 150 gr de azúcar
- 150 gr de harina de reposteria
- 75 gr de aceite de girasol
- 1 sobre de levadura
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1 pellizco de sal
Manos a la obra:
- Precalentar el horno a 170ºC.
- Engrasar un molde y espolvorear con harina.
- Poner las nueces en el vaso y triturar 15 segundos velocidad 5. Reservar.
- Poner la calabaza troceada, y triturar 20 segundos a velocidad progresiva 5-7-9. Bajar los restos de las paredes con la espátula y programar otros 15 segundos velocidad 5-7-9. Reservar.
- Poner la mariposa en las cuchillas.
- Echar los huevos y el azúcar y programar 6 minutos velocidad 3,5.
- Añadir el resto de los ingredientes por este orden: calabaza, aceite de girasol, harina, levadura, sal, canela y nueces. Mezclar 15 segundos velocidad 4.
- Si no se ha mezclado bien, mezclar con la espátula.
- Verter en el molde y hornear unos 50 minutos a 170ºC (dependerá de cada horno).
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